Paracas y Nazca



Tras visitar Lima, nuestro próximo objetivo es llegar a Nazca para ver las famosas y misteriosas líneas que solo se aprecian desde el aire. Pero como el viaje es de 8 horas de autobús y lo que nos sobra es tiempo, decidimos hacer una parada en la mitad del camino, en Paracas, un agradable pueblito de costa que muy dignamente ha aprendido a sacarle provecho a sus recursos naturales sin renunciar a su forma de vida. Tan sólo ha sido necesario asfaltar un paseo muy agradable junto al mar y organizarse para enseñar lo que tienen: las Islas Ballestas y la Reserva Natural de Paracas. Pasamos un día muy agradable visitando estos dos lugares naturales. En las Islas Ballestas hemos podido ver pingüinos, leones marinos, delfines y una gran variedad de aves. En definitiva un pueblo muy tranquilo que bien merece una parada en el camino para pasar un par de días de relax. Aunque están construyendo un hotel de la cadena Hilton, ya se verá lo que pasa. Y de nuevo cogemos el autobús y nos dirigimos a Nazca. El pueblo en sí no ofrece nada interesante únicamente es la puerta de entrada para ver las líneas de Nazca. Negociamos el precio y por 50$ cada uno sobrevolamos en avioneta las líneas. Hay muchas compañías que ofrecen este servicio y seguramente regateando podríamos haber sacado un poco más barato, pero nos decidimos por Aerocondor, ya que nos da más seguridad, sobre todo teniendo en cuenta que ha habido varios accidentes de avionetas.

Llegamos por la mañana al pequeño aeropuerto que lleva el nombre de Maria Reiche, la gran investigadora que dedicó casi toda su vida al estudio y conservación de las líneas de Nazca. Nos esperan 35 minutos para sobrevolar 13 dibujos: el colibrí, el mono, la ballena….. Nos subimos 

a una pequeña avioneta con una chica francesa y nuestro “gran piloto” que ocupa su sito y el de Ibon. Antes de despegar nos dice: “hoy 16 de julio tenemos un buen día para volar”. Y Lorea le recuerda: “sí, día del Carmen”. El piloto se emociona y le responde: “gracias por recordarlo” y dándole la mano nos enseña una estampita de la virgen del Carmen que portaba desde 1991 coincidiendo con su primer vuelo. “Por lo tanto este día no nos estrellamos”, nos comenta. Nos quedamos muuuucho más tranquilos. Despegamos pero la virgen no evita que nos mareemos. Menos mal que hemos decidido no desayunar nada, sino igual hubiera habido fiesta. Pero realmente el vuelo ha merecido la pena, las líneas existen y se ven bien claras desde el aire. Lo cierto que es un lugar muy extraño. En medio de la pampa peruana y en un terreno muy árido se ven claramente los dibujos sobre una meseta que parece diseñada a propósito para ello.

Han sido muchos los investigadores que se han interesado por dar una respuesta a las líneas y hay teorías para todos los gustos y creencias. Pero fue Maria Reiche, una de la investigadoras más conocidas, quien planteó que las líneas de Nazca representaban el calendario más grande del mundo. Dedicó toda su vida al estudio, a las medidas y orientaciones de los geoglifos tratando de establecer una relación entre ellos y la posición con respecto a los astros. Pensaba que los pobladores de Nazca habían utilizado esta área astronómica para conocer cuándo empezaba cada estación, cuál era la mejor época para cosechar y cuándo se iniciaban la lluvias. “La Dama del Desierto” murió en 1998 a los 94 años y gracias a ella se conservan estas líneas que en su día estuvieron a punto de hacerlas desaparecer. En la documentación existente se le puede ver midiendo, estudiando y descubriendo nuevas líneas e incluso barriéndolas con una escoba en su empeño en que no desaparezcan. Hoy en día queda una cicatriz por curar: la carretera Panamericana que cruza la meseta e incluso los vehículos pasan por encima de uno de los dibujos. Resulta irónico, teniendo en cuenta que está prohibido bajarse del vehículo y adentrarse en las líneas.


Tras el vuelo vamos a realizar una reflexión cada uno sobre lo que hemos visto:


IBON: Después de ver las líneas, la única conclusión que saco es que son para comunicarse con el más allá, ya que solo se pueden apreciar desde el aire y suponiendo que en aquella época no volaban pues no le encuentro otra explicación, hacer un dibujo para que nadie lo pueda ver, pues ya ves tú. Ha sido necesario que empezáramos a volar para descubrirlas. Por el emplazamiento en el que se encuentran y los símbolos que están dibujados, solo me llevan a esa conclusión. Además, ¿por qué en aquella época ellos no iban a creer que hay vida en otros planetas?, cuando se supone que eran grandes conocedores de los astros. Además, hoy en día también hay mucha gente que cree en ello y mandan mensajes y señales al espacio.


LOREA: La primera impresión es que el lugar es simplemente extraño y los dibujos le añaden una dosis más de misterio. Se trata de una explanada árida en la que se suceden estos dibujos perfectamente diseñados que sólo se pueden ver desde el aire. Creo que es algo que nosotros no podemos entender, se escapa de nuestro razonamiento y van más allá de una simple conclusión. Nuestro razonamiento nos lleva siempre a buscar respuestas lógicas, es por ello que considero que no lo entenderemos nunca porque va más allá de esa simple lógica. La pregunta que hay que hacerse no es quiénes ni cómo las hicieron, sino para qué. ¡Ah, Ibon!. ¿Quién te ha dicho a ti que no volaban?....


Próximo destino: Arequipa y Cañón del Colca.
3 Responses
  1. Lander Says:

    Yo creo que el "por qué" y el "para qué" dan juego a la hora de pensar en las líneas de Nazca, pero yo lo que me pregunto es "cómo" se las apañaron para hacerlas, el tema de la perspectiva, las proporciones... Es alucinante...


  2. gorka Says:

    Caroline, manifiestate!!!!!. Yo creo que somos muy incredulos y pensamos que solo nosotros tenemos tecnologia moderna. Y si ellos eran mucho mas adelantadops que nosotros?.

    GORA KARMENGO JAIAK!!!!!


  3. Josu Says:

    nitzako lo que dice ibon tiene tiene su logica.


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